En el mundo del cine, los momentos inesperados pueden llegar a ser tan memorables como las propias películas que llenan la pantalla grande. En esta ocasión, el actor cubano Carlos Ever Fonseca nos comparte una anécdota que ha quedado en su memoria: el encuentro con el icónico actor de Hollywood, Kevin Spacey.
Durante el rodaje de la película “Alias Bambi C-4”, Carlos Ever Fonseca se encontraba en pleno estudio junto a otros actores cubanos, entre ellos Patricio Wood y Carlos Padrón. Todos se preparaban, pero Carlos aún no llevaba su vestuario de personaje ni maquillaje.
De manera inesperada, un asistente de producción anunció la llegada de una visita especial de Hollywood al set. Sin apenas tiempo para asimilar la noticia, los actores se encontraron cara a cara con el renombrado Kevin Spacey, quien apenas dominaba algunas palabras en español. A pesar de la barrera del idioma, el director Eduardo Barberena, un experto en inglés, estableció un diálogo con el invitado sobre la película que rodaban.
Durante la conversación, la trama de la película tomó protagonismo. La cinta trataba sobre un sicario cubano contratado por la C.I.A., y en un giro sorprendente, Kevin Spacey insinuó que sabía quién era el actor que interpretaba al asesino. Con una sonrisa en su rostro, señaló a Carlos Ever Fonseca, quien quedó atónito por la precisión de la observación. En ese momento, Carlos no estaba en el papel del personaje, sino siendo él mismo, lidiando con su característica timidez.
“Wait, I think I know which actor is playing the killer. Is he…” mencionó Spacey, dejando a todos en un estado de asombro. Las palabras del actor de Hollywood han quedado en el recuerdo de Carlos, dejando una pregunta intrigante: ¿cómo logró Spacey detectar algo tan abstracto? ¿Fue su maestría y experiencia las que lo guiaron, o Carlos se había involucrado tanto en su personaje de manera inconsciente?
La incógnita persiste en Carlos Ever Fonseca y agrega una capa de misterio a la relación entre los actores y sus personajes. Sin importar la respuesta, esta anécdota se suma a la galería de experiencias que enriquecen la carrera de un actor y demuestran que en el mundo del cine, la autenticidad y la maestría pueden entrelazarse de formas sorprendentes.
El recuerdo de ese día se inmortalizó en una fotografía que captura a los actores cubanos junto a Kevin Spacey y, ¿por qué no?, en la historia del cine cubano.
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