Por: Ashly Medina (Ashly, la novelera de Cuba)
Cuando hablamos de la honestidad, pensamos en esa cualidad que define la calidad humana y consiste fundamentalmente en comportarse y expresarse con coherencia y sinceridad, de acuerdo con los valores de verdad y justicia. Partiendo de lo antes expuesto, cuando disfrutamos de la Telenovela «Viceversa» pensamos que entonces la honestidad es uno de esos valores que hoy en día está decadente en nuestra sociedad y es muy fácil descartarlo por la tasa del baño cuando de dinero e intereses personales se trata.
La honestidad es, en el sentido más evidente de la palabra, el simple respeto a la verdad en relación con el mundo, los hechos y las personas, pero no siempre somos conscientes del grado en que está presente en nuestros actos.
En «Viceversa» hemos visto cómo todos mienten, en mayor o menor grado y conste, en la vida real pasa igualmente, aunque muchos insistan en denominarlas mentiritas piadosas, para salvar determinada situación.
Y es que no ser honestos hace que perdamos la perspectiva con respecto a los propios hechos, y de esta manera Esther mentía sobre su enfermedad, Leonardo sobre su inclinación sexual, Silvio sobre sus sentimientos hacia Patricia, Salvador le era infiel a Yanet y Susana miente sobre el placer que no siente al hacer el amor con Gerardo, tan solo por citar algunos ejemplos.
Y es que no es menos cierto que se viven tiempos de pérdida de valores en algunos segmentos de la sociedad y es oportuno reflexionar acerca de esa cualidad que constituye ante todo una actitud hacia nosotros mismos, porque representa, sin dudas, una condición fundamental en las relaciones interpersonales, para lograr la amistad y la auténtica vida comunitaria. Ser deshonesto es ser falso, injusto, impostado y ficticio. Es por ello que muchos ven mal que Pilo se haya gastado el dinero y no lo haya entregado a las autoridades o que Ángela llegue y se presente como Carmen o Irina, también se cuestiona el hecho de que El Yety no hable claro de lo que pasó aquella noche en el restaurante que le costó la vida a Salvador y que Laura quiera tener sexo con Armando mientras él tiene una relación estable con Gina.
Y es así, mientras algunos presumen de ser muy amantes de la verdad, como Silvio, otros ya mienten de vicio como Pedro o Manolo.
Lo cierto es aquello que dijo un sabio una vez: «errar es de humanos». Por eso tengo fe en que ante el caos que genera una mentira, la verdad sea el único camino, pues quien en el fondo es honesto, acepta cuando comete un error o equivocación y retoma el camino correcto.
Resulta oportuno reflexionar que si en la novela, todos mienten deliberadamente, estoy convencida de que se persigue como fin que podamos visualizar los errores y no cometer los mismos nosotros al lado de acá de la pantalla del televisor. Recordemos que ser honestos no consiste solamente en la franqueza o la capacidad de decir la verdad, sino en asumir que la verdad es solo una y que no depende de personas o consensos. Seamos honestos, dándole valor a la verdad o viceversa. Requiere, por lo tanto, un acercamiento a la verdad, no mediatizado por los propios deseos.
El filósofo Sócrates fue quien dedicó en la antigüedad mayores esfuerzos al análisis del significado de la honestidad.
Posteriormente, dicho concepto quedó incluido en la búsqueda de principios éticos generales que justificaran el comportamiento moral.
Un individuo honesto es el que actúa y habla de conformidad con lo que considera correcto, pero no hace de tales actuaciones un escenario teatral para ser reconocido por los otros.
Los buenos o malos sentimientos y cualidades no nacen con las personas, se forman mediante un proceso educativo que debe comenzar desde edades tempranas, y en el cual el ejemplo y la actitud de la familia son factores principales para lograr individuos sensibles.
Así, cada uno valorará lo que le corresponde y actuará basándose en sus propios principios.
Liribet Reyes Rivero, graduada en Derecho en la Universidad de Las Villas Martha Abreu, y novelera por excelencia. Con su sólida formación académica y su pasión por las telenovelas, Ashly se une a nuestro equipo en CubaActores para ofrecer sus excelentes comentarios y análisis sobre la telenovela cubana.
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