Omar Alí es una de las figuras más emblemáticas del arte dramático en Cuba. Este prolífico actor no solo ha dejado una profunda huella en el teatro, la televisión y el cine cubano, sino que también ha incursionado con éxito en la dirección de programas. En este artículo exploraremos diez fascinantes datos sobre la exitosa trayectoria artística y personal de este talentoso artista cubano.
Nació en La Habana el 5 de septiembre de 1963.
Se graduó de la Escuela Nacional de Arte en 1982 e integró el grupo Teatro Estudio hasta 1999.
Ha trabajado en teatro, televisión y cine con importantes directores cubanos como Humberto Solás, Raquel Revuelta y Héctor Quintero.

En 2006 ganó el Premio Caricato a la mejor actuación masculina por su personaje de Edgardo en la telenovela “¡Oh, La Habana!”.
En teatro obtuvo la Mención Especial del Premio Covarrubias en 1993 por “Concierto Barroco” y el Premio Caricato en 1994 por su participación en la serie “Día y Noche”.
Ha participado en más de 10 telenovelas cubanas como “El Eco de las Piedras”, “Tierra Brava” y “Violetas de Agua”.
También ha actuado en películas como “El Siglo de las Luces”, “Habana Blues” y “La Pared de las Palabras”.

Disfruta especialmente interpretar a villanos por su complejidad emocional. Su personaje soñado es Otelo.
Está casado con la actriz Iris Pérez, quien es su mayor crítica y admiradora. Tiene gran influencia en su vida y carrera.

En 2005 se graduó en Dirección de Televisión. Ha dirigido telefilmes como “Decisiones” y episodios de programas muy populares como “Vivir del Cuento”.
La extensa y versátil carrera de Omar Alí da testimonio de su incansable dedicación, adaptabilidad y amor por las artes escénicas. Sus memorables interpretaciones han enriquecido enormemente la cultura cubana. Su prolífico legado seguirá inspirando a futuras generaciones de actores y directores en Cuba. Omar Alí es, sin duda, una figura invaluable de las artes dramáticas cubanas.
Compártenos tu opinión sobre esta publicación